- Todos me quieren

Sin mas rodeos y tal como el titulo lo dice: “Todos me quieren”. ¿Quiénes son todos y como lo se?, okey – elimino la exageración, en mi trabajo varias areas me quieren – y lo se por que tengo los pelos de la vaca en la mano.

Resulta que la historia va algo así:

Yo trabajo para un corporativo, pero mis labores son en “campo” – quiere decir que me la paso fuera de las oficinas de mi corporativo, para andar de unidad de negocio en unidad de negocio-. Empecé como coordinadora de proyectos y al renunciar mi jefe, me convertí de manera natural en la líder del proyecto.

Después de 2 implantaciones el director de la empresa la cual es mi promovedor de desarrollos en estos proyectos, se acerca a mi y me ofrece trabajo. Las actividades a desempeñar, son muy similares a lo que hoy hago, pero con mayor responsabilidad. La oferta me encanto , pero no puedo renunciar en medio de un proyecto inconcluso – no es profesional- además los intereses entre ese director y mi director van mas aya de la amistad y el “robo de talentos” esta regularizado mediante políticas – so, hay que hacer las cosas bien-.

En esos días, me llama el gerente de la unidad de negocio donde actualmente estoy laborando, para informarme que debido a mi desempeño el promovió que de me aumentara mi suelto. Mi jefe me habla y me informa la buenísima noticia del 25% mas – wow!! Es un madral, me merezco mucho más, pero en los trabajos no suelen ser tan explendidos-. La promoción no llego de gratis, con ello se me aumento a un 50% mis responsabilidades y por supuesto la oferta de quedarme de planta en dicha unidad de negocio.

¬ Mi cabecita da vueltas, puesto que el trabajo con mi proveedor es sumamente mejor y mas emocionante; la nueva oferta de quedarme ya en forma fija en una empresa donde ya laboro – sin el temor de que un día se les de por cancelar los proyectos etc.- pues es como cuando dicen, mas vale malo por conocido.

Mi nuevo jefe – el que sustituyo al que se fue del corporativo- es todo un barcote, ratón de escritorio, como profesión es una actuario – ósea un chingon en los números- pero al cabron no lo haces mover su seguramente arrugado trasero, para ver que onda con lo que yo hago aquí. A mi me ha servido para crecer y darme mas a conocer, pero para el proyecto me ha causado problemas – eso aunado que tiene serios problemas con mi cliente interno (el gerente que me dio la promoción y a su vez quiere que me quede con el)- pues me siento en medio de una guerra de niños berrinchudos que los dos quieren ser los lideres del proyecto. Eso mas otros intereses empresariales, hacen que mi nivel de estress ande por los cielos y quiera salir huyendo de este agujero – peeeeero, si me salgo y mi proveedor solo me blofeo!... que miedo, tengo que aguantar-.

Resulta que llega mi director – el jefe de los otros dos berrinchudos- y nos reúne a todo el equipo para hacernos ver las nuevas directrices y la restructuración de los proyectos – por que para entonces ya son mas los proyectos-. En dicha reunión me elevan el ego con cosas así como “has demostrado ser una excelente líder”, “tienes gran potencial”, y me ofrecen mayores responsabilidades y prometen un training que me llevara a un crecimiento laboral – a nadie le dan pan que llore, eso es lo que todos los que nos chingamos la madre en un trabajo tan desgastador queremos”.

Salí como pavorreal de la junta, pero nunca se hablo de dinero, mi estancia tendría que ser permanente en este pueblito de ranas, y además el nivel de estrés cada vez es mayor – puesto que el gerente que me promovió el aumento ha resultado ser toda una fichita traicionera-. Y por otro lado, es la garantía de tener un trabajo. (OH! Frustración!)

Se presenta mi proveedor como enviado del cielo y me dice, mi oferta sigue en pie; Te sigo esperando y entiendo que tienes que concluir los proyectos internos. - ¿quieres ser parte de mi empresa?, SI, le respondí. Bueno esto es lo que te ofrezco – hablamos de $$$- y me quede WOW!!! … no mames, a la chingada con el profesionalismo, renuncio al instante – pensé-. Pero no se puede, hay muchas cosas que se tienen que cuidar, además el renunciar así nada mas seria como decirle a mi proveedor – “de mi no esperes nada, el día que me lleguen al precio te dejo todo botado”-. SOOOO tengo que esperar.

Con tal noticia, me arme de valor y hable con mi jefe ratoncito del corporativo y le expuse mis intereses y desinterés de crecimiento. Hable clara y de manera sincera y le asegure el término de los proyectos.