lunes, marzo 01, 2010

Fumar Ain't Cool

De los lapsos que debería de guardar en silencio esta este que a continuación relatare.

Todo empezó una noche en el rincón de los rumberos, una deliciosa noche llena de salsa, merengue, buen tequila, mesa al frente de la pista y una serie de amigos con quien sudábamos mientras bailábamos.

La grandiosa idea de pedir un cubano fue mía, 100 pesos costo el primer puro que compre y debo admitir que su sabor a cohíba bien conservado lo disfrute cada que inhalé de ese puro abrazado por mis castos labios.

De ahí le siguieron Cohíba cigarritos, mas puros, mas tabacos, mas ansiedad por aprender a controlar esos cigarrillos que según los conocedores yo me empeñaba en bautizarlos.

Cada que pensaba en pararme por uno, dirigirme a encender un cigarro, me repetía a mi misma – no necesito esto, arrepentida de mi vida me daré si consigo algún diagnostico de cáncer-. Eso no me detenía, no podía ante el habito de tener algo en la mano mientras platicaba, mientras leía, mientras bebía, mientras lo que fuera.

Puedo continuar relatando experiencias al respecto. Y todas las razones por las cuales pensaba que debía dejarlo. Los dientes verde aceituna con forma de tiburón de Ceballos no lo lograron, el tipo en la central que prefirió sentarse en otro lado, no lo logro; fueron las chicas desconocidas que me dijeron que si empeñaba en bautizar los cigarros terminaría con la lengua y la parte interior de los dientes negros – ahí viene a mi mente una imagen clara de una dentadura que conozco de una persona que así los tiene – En ese momento decidí apagar el cigarrillo y ya no mas encender otro.

Llegando a tabasco no he consumido ninguno, aun así que aquí todos quienes me rodeaban tiraban mas ceniza que las chimeneas de las calderas del ingenio. Le comente a un buen amigo – mi broda -; deberías considerar dejarlo tu también.

A las chicas no les gusta el sabor a cigarro y menos el salir con alguien que despide tabaco, el olor en las manos es asqueroso; la gente que no fuma te rodea, es incomodo el siempre tener que estar buscando un lugar adecuado para sentarte, ya no es permitido fumar en lugares cerrados, una casa donde fuman apesta, los dientes se manchan; la lista continuo así, y por mucho que quise encontrar una sola razón por la podría continuar haciéndolo, no la hubo.

En ese momento @Fhercho me extiende su cajetilla a medio llenar y me dice, Broda, no lo necesito mas.

Llevo un mes sin fumar, sin sentir ansiedad y sin sentirme tentada; ya experimente y ya lo deje por la paz… si tu que me lees fumas, te aconsejo lo reconsideres.

Fumar Aint Cool

2 comentarios:

Zu dijo...

Yo empece a fumar en la Universidad, (ya sabes, "mono ve, mono hace") luego lo deje un rato y asi me la he llevado, lo dejo un buen rato y en momentos regreso a el.
Si ya se, es un feo hábito y ahora con eso de que ya no se puede fumar casi en ningun lugar y con los cambios en mi vida, ya no se ni cuanto llevo sin fumarme un rico cigarrito...

Anónimo dijo...

Kaustik:

a poco fumas? nunca percibi el olor a tabaco en tus ropas, vaya que siguen las sorpresas, juro que nunca lo note, pero es bueno que lo dejes :P