Estaba aburridísima el domingo que empecé a divagar entre mis recuerdos y me acorde cuando chica una vez jugábamos con unos rifles de madera que tiraban ligas y era muy divertido darnos de ligasos. Éramos montones de niños y yo era la única niña y la que mayor puntería tenia.

Por consecuencia, me gane muchos enemigos que tiraban a pegarme, pero yo hábilmente me les escapaba. Hasta que uno muy vivo –Mi hermanito menor- se escabullo y desde un lado de mi me tiro justo en el ojo. Yo me acuerdo que vi un destello blanco y luego mi ojo empezó a llorar a cantaros, no podía ir de chismosa con nadie por que sabía que saldría regañada, así que me aguante. Con el escándalo que todos hicieron de que me habían dado y que con ello me hicieron llorar, pues los adultos llegaron y a todos nos regañaron, nos confiscaron las armas y prohibieron jugar de esa manera por el resto de nuestras vidas.

Aun recuerdo aquel día, el dolor ya no esta, solo las risas y lo divertido que era jugar.

Veo al nene y me doy cuenta que el solo juega con juguetes comprados, así que se me prendió la brillante idea de fabricarles sus propios rifles tira ligas a El y al Sobrino. –¡¡LO SE, LOSE !! se que son peligrosos … pero es que eso era lo mas divertido!!!- asi que aplique las advertencias necesarias y los atemorice lo suficiente como para que no se apunten el uno al otro nunca en su vida-.

Los juguetes DYS, fabricados con lo que prácticamente era basura, han sido tan populares que desde el domingo solo jueguen con ellos; hacen competencias de tiro al blanco entre los vecinos – y realmente me han sorprendido que hayan logrado dominar el juguete al grado de poder pegarle a lo que le apuntan-.

Ahora me han pedido que haga mas rifles para el resto de la chamacada por que piensan venderlos jajajja, – bah!, lo que tengo en mente es hacer una casa del árbol como próximo proyecto-.