Estábamos sentadas en el sofá cómodo, Karla y una servidora; tirábamos weba viendo un capitulo repetido de Dr. House. Platicábamos muy de cerquita, nos reíamos de chismes; era una escena muy cotidiana entre nosotras, donde nos sentamos entre mis piernas y las de ella- realmente ese sillón es un multiusos que puede servir de cama para uno, dos, o para hacer muchas cosas mas no solo webear o dormir, no importando que sea un sillón individual-.

A lo que quiero llegar es que era una tarde de fin de semana típica de weba, cuando llega el bebe –osease nuestro hijo en nuestra mini grandiosa familia- … “hay si chichis, ustedes dos dándose mucho amor, y ¿yo que?”… jajajaja , diría mi papa “esos elotes están muy tiernos” …

Amo a mis nenes, la bebota y el bebito, a los dos los tenía en mis piernas dándoles amor con cariñitos y besitos.

:D

Y no, no hay moraleja, ni un fin para este post, solo quería decir lo que dije.